top of page

El homosexual que fue clave en la independencia de los EE. UU.


Es increíble que tengamos que llegar hasta el siglo XXI para darnos cuenta de que ser homosexual no está mal. Si en el nuevo continente se supiera que indirectamente gracias a un homosexual nos libramos del yugo y opresión de los europeos, quizá hasta ya tendríamos alcaldes o presidentes homosexuales. Un ejemplo clarísimo es Klaus Wowereit, catalogado como uno de los mejores alcaldes del mundo y de los más célebres en Berlín, durando casi 3 lustros al mando (2001-2014), unió una sociedad que estaba en proceso de reintegración luego de la caída del muro, logró que en Berlín se respirara tolerancia y diversidad de pensamiento. “Soy gay y está bien que así sea”, frase que lo hizo célebre y cambió la perspectiva de millones de personas hacia la comunidad LGBTI. El protagonista de hoy es Friederich Wilhelm Von Steuben, más conocido como Baron, fue un militar prusiano que nació el 17 de septiembre de 1730, hijo de un teniente del Reino de Prusia, con quien fue al Imperio Ruso a servicio de la zarina Ana de Rusia. Luego regresó a Alemania, donde con sólo 17 años se convirtió en oficial del ejército prusiano. Cuando nos referimos a la independencia de los Estados Unidos, la historia nos pone por encima a George Washington, Benjamin Franklin, John Adams, Thomas Jefferson, James Madison o John Jay, y muchos otros antes que el general Von Steuben. Se sabe que Baron tuvo una carrera brillante en el ejército prusiano hasta que se supo de su homosexualidad. Fue declarado internamente como sodomita sabiendo de los peligros que corría si se enteraban de ello, incluso podía ir a juicio. Luego de ser declarado como sodomita, su vida era todo un caos, hasta que se topó con Benjamin Franklin. El norteamericano vio que sus cualidades y habilidades eran increíbles y tenía presente que su ejército necesitaba un entrenamiento arduo. Benjamin le escribió una carta a Washington a nombre de Baron ofreciendo ayuda, a lo cual George lo aceptó y viajaron desde Francia hasta la región de Valley Forge. El ejército de los Estados Unidos en aquella época era un gran grupo de agricultores, artesanos y comerciantes aguerridos pero sin disciplina y pocos dotados de técnicas o entrenamiento militar. No obstante, cuando Von Steuben llegó al nuevo continente, instauró nuevas tácticas de combate, combinando la inteligencia, técnica, orden y por supuesto, la fuerza. Todo con el objetivo de vencer a los ‘Casacas Rojas’ británicos. Posteriormente, Estados Unidos se libra del Imperio Británico, y finalmente firman el acta de independencia un 4 de julio de 1776. A pesar de que gracias a este general ganaron la guerra de la independencia, en los Estados Unidos se prohibió que personas pertenecientes a la comunidad LGBTI prestaran el servicio militar. Duraron así hasta 1993 cuando Bill Clinton llega a la presidencia e instaura la ley Don’t ask, don’t tell (No preguntes, no digas), por la cual se estipulaba que las personas LGBTI podían prestar el servicio militar siempre y cuando no dijeran nada acerca de su orientación sexual. Sólo hasta 2010, Barack Obama firmó un proyecto de ley para que las personas homosexuales puedieran prestar su servicio militar sin el miedo de ser juzgados si se declaran gais, lesbianas, bisexuales o transexuales. ¿Quién iba a creerlo? Un homosexual salvó la patria que hoy en día es la máxima potencia. Sin embargo, en América Latina se respira cierto aire de homofobia. El procurador Ordóñez quien aún vive en el siglo XIX creyendo que la Constitución debería ser cambiada por la Biblia, persiguiendo homosexuales, quemando libros de García Márquez, Marx, Rosseau…, tratando de prohibir los besos en los colegios y demás ideales que no son dignos de un funcionario público – y más aún si pertenece a un ente de control como la Procuraduría-. En 2008 Nilson Pinilla, magistrado de la Corte Constitucional, se refirió de manera despectiva ante los homosexuales. “Son enfermos a quienes hay que prestarles atención sicológica”, manifestó. Los homosexuales son seres humanos, y tienen las capacidades físicas, sicológicas e intelectuales de cualquier otra persona, por ende están en todo el derecho de formalizar su relación con sus respectivas parejas. Suena más que cómico que una senadora del partido Liberal como Viviane Morales se oponga al matrimonio de parejas del mismo sexo, sin embargo se entiende que la política es una dinámica cambiante y la ideología de cada partido político está en tela de juicio. Siempre que se habló de un hombre afeminado o gay, se le relacionaba con delicadeza y cobardía; después de saber que gracias a Baron Von Steuben Estados Unidos es libre y ello impulsó a que las naciones hispanas hicieran lo mismo, se relacionaran como personas normales que pueden hacer historia como cualquier otro heterosexual. Adenda: Hace pocos días en los Estados Unidos se habló de que posiblemente el billete de 20 dólares cambiaría de imagen. La protagonista sería Harriet Tubman, afrodescendiente abolicionista que ayudaba a escapar esclavos del yugo de los estados esclavistas al sur de los Estados Unidos durante el siglo XIX, quien remplazaría a un padre de la patria, Andrew Jackson. Donald Trump presentó su inconformidad argumentando que Jackson "ha estado en el billete por muchos años, y es alguien que fue muy importante para este país", y que a pesar de que Tubman fue fabulosa ella debería estar “quizás en el billete de dos dólares o crearemos otro billete", sentenció.

Recent Posts
bottom of page